domingo, 5 de agosto de 2018

LA ÉPOCA


a Jorge Aulicino 
Quizá lo que sucede 
es que la realidad 
se agigantó, y copiamos 
en versiones sin vuelo 
eso que nos rodea: 
ya la imaginación 
se retiró. La pobre 
poesía agoniza 
porque sabemos mucho:
lo que temía Nietzsche. 
Somos tan sólo sombras 
desprovistas de magia, 
malditos anodinos. 

sábado, 4 de agosto de 2018

DESDE LEJOS NO SE VE


Alguien dijo de mí 
que soy feliz. Que siempre 
ando sonriendo, con 
una palabra amable 
para todos. No habrá 
registrado la forma 
en que destilo hiel 
a veces en el Facebook. 
No habrá sentido tus 
gritos cuando peleamos. 

viernes, 3 de agosto de 2018

LAS HAY


Dos estrellas de cinco 
puntas trazaste, casi 
sin pensarlo, en el dorso 
de mi mano con una 
lapicera color 
azul. Te dejé hacer 
esta vuelta y ahora, 
mientras vos descansás 
en tu cama y yo leo 
Butor, las miro. Tanto 
como ese dúctil pase, 
reconforta el saberte 
de mi lado. No causa 
y efecto esos dos núcleos, 
sino el modo sutil 
en que los dos anidan 
uno en otro y se funden. 

miércoles, 1 de agosto de 2018

CANDOR


Se fascinan con una 
flor que no tiene espinas 
supuestamente. Parten 
su tierno corazón 
en dos mitades para 
ofrecerlas al mundo. 
Hablan de poesía 
como si fuera un reino 
absoluto. Se mienten.
(Y la Guerra prosigue, 
real y poderosa.)

martes, 31 de julio de 2018

EL JUEGO EN EL QUE ANDAMOS


Te morís y ¿quién va 
a publicar tus versos? 
Pulirlos, ordenarlos 
y, lo más importante, 
ir con los gastos, ¿no? 
Lo que queda es reunir, 
cuando tengas sesenta 
aproximadamente, 
lo que hasta ahí escribiste
y hacer un libro gordo 
con todo ese amarroque.
Casi como un conjuro 
contra el fatal olvido. 

domingo, 29 de julio de 2018

NUESTRO SIEMPRE


Los autos ya comienzan 
a circular: la noche 
se desmenuza. Lo 
que era incierto se tiñe 
poco a poco de luz, 
de un calor y un sentido. 
La Aurora de rosáceos 
dedos --la que devuelve 
las cosas a su origen 
más nítido-- retorna. 
(La ambición se relame; 
el músculo hablará.) 

sábado, 28 de julio de 2018

COMPAÑEROS POETAS


¿Quién lee todas esas 
palabras que agregamos 
pacientemente al mundo? 
Denunciamos los males, 
nos extasiamos con 
una flor o reímos 
incrédulos, y nada 
parece detenerse, 
parece vacilar 
ante los movimientos 
de nuestras almas; nada 
ha cambiado en el mundo 
con nuestros versos. Fútil 
ilusión pretender 
voz y voto en la toma 
sin fin de decisiones.